Giorgos (II)

-¿Giorgo?

-¿si?

- Giorgo, eres un buen chi..

-No sigas la frase por favor... este inicio intuyo que solo puede tener un "pero" a continuación...  

-... 

-esperame un segundo que bajo a por tabacco que no me queda y ya veo que lo necesitaré. No te vayas por favor... ahora subo, además no me llevo las llaves

-vale

Giorgos se vistió deprisa y bajó las escaleras corriendo. Le costó encontrar un estanco a estas altas horas de la noche (eran las dos o tres de la mañana), compró tabaco y se sentó en un banco. Encendió uno y empezó a llorar. Necesitaba llorar antes de subir, se había prometido no dejar que le volviera ver llorar. Era un recurso demasiado fácil aunque efectivo de chantaje emocional y además se había prometido no volver a arrastrarse si le decía que lo mejor era dejarlo... no tenía sentido intentar hacerle cambiar de opinión. En silencio repasaba los últimos meses en su mente y reconocía que su vida mostraba pocos signos de coherencia... lo que conducía a que todos pensasen que mentía compulsivamente... pero cosas mas raras se han visto, podrían ser verdad...  ahora en su casa le estaba esperando el que fué su chico durante los útlimos cuatro meses y que parecía haber agotado excusas y ganas de comprensión ¿tendría algún efecto intentar hacerle cambiar de opinión de nuevo?  ¿decirle otra "verdad" más, haria que mereciera otra oportunidad? ¿y hasta cuando?... no, no tenía sentido. Esto se acababa aquí y no tenía las fuerzas para revelarle la verdad, pedir ayuda o luchar para mantenerle. Se acababa aquí como otras tantas historias pasadas y futuras...

Yo, atrapado en su casa, sufría el paso lento del tiempo. Los minutos parecían horas y no había manera de contactar con el. No sabía que pensar y a la vez en mi mente miliones de posibilidades se agolpaban produciendome un estado de ansiedad. Por una parte me parecía inaceptable el haberme dejado allí todo preocupado por si le habia pasado algo y por otra parte esa reacción entre infantil, torturadora y peliculera me confirmaba que esto no podía seguir... me costaba creer todo lo que me decía sobre su vida que no era coherente con lo que viviamos, ¿o si?. No sé... cosas más raras se han visto. En fin... lo mejor era dejarlo. A ver si vuelve sano y salvo. Joder, ni siquiera tiene telefono en esta casa y además no tengo el telefono de ninguno de sus amigos para llamar... ¿Donde estará? Estaba a punto de salir a llamar a un amigo mío e ir a la policía

casi las seis de la mañana... y el alba despuntando en el horizonte... ¡dios! pensó y se fue casi corriendo a casa  

...tocó el timbre. La puerta se abrió y nos enfrentamos un Giorgos cabizbajo y yo. Abrí la boca para soltar alguna impertinencia fruto de la preocupación y frustración por el "encarcelamiento" pero me tapó los labios con el dedo.

-No digas nada por favor... siento tardar tanto. Necesitaba pensar un poco. - Pe.. - No, no digas nada. Entiendo que lo que quieres es irte... de esta relación (puntualizó). Por favor te lo pido que te vayas sin decir nada más... no quiero escucharte y la verdad es que no sabré que responder. Pasó por delante mío y yo -no recuerdo el cómo- me encontré por el otro lado de una puerta cerrada sin haber dicho nada. Allí acabó todo...

Le ví un par de veces más en las que intercambiamos algunas palabras obligadas... era obvio que no quería codearse conmigo.

Unos años después supe que se fué a vivir a Holanda...

you tell me that you're lying

but I know it's not true

you say you didn't do it

but I know it was you

If I tell you that I love you

would that make me a liar too