limetia (IV)

..en este punto de la historia no me queda otra que sonreir pensando que dentro de 50 años y en compañia de tres amigos, volveré a contar esta historia de esta manera : "Imaginaos esto: Sicilia, Marzo del dosmil uno. Un apuesto joven de 27 años, piel morena, vestido con vaqueros y una camisa blanca, pasea por las pintorescas calles de Taormina en busqueda de una librería... (imitando a Sofia contando su encuentro con Picasso en esta inolvidable escena de las "Chicas de oro")

....allí estaba pues, en Taormina, Sicilia, paseando tranquilamente por las calles, admirando el paisaje y buscando una librería donde comprar el principito en italiano. Taormina es un pueblo precioso con una plaza-balcón que ofrece unas impresionantes vistas sobre el mar. Justo antes de llegar a esa plaza hay una pequeña casa de madera, que resultó ser una libreria para niños (esperaba que en cualquier momento saldría a atenderme Meg Ryan, pero no) y que en su estanterías descansaba una edición especial de “Il Piccolo Principe” con abundante material inedito (me compré dos y le regalé uno a limetia, el Florencia). Apunté la fecha (24/03/2001) y escribí "... siguiendo los pasos del Gran Azul..." (película fetiche de servidor que ha sido rodada en las islas griegas de Amorgos e Ios, Taormina, Nueva York, Perú, Francia, Islas Virgenes... lo que me falta recorrer para seguir todos los pasos de ese rodaje, dios!)

Tengo el recuerdo de estar en un banquito ojeando el libro recién comprado... cuando recibí un mensaje que me advertía que... una huelga de trenes amenazaba con impedir a limetia viajar de Florencia a Roma que era nuestro punto de encuentro, al que respondí "cariñosamente":
Me da igual... te vas andando, pero mañana a las 09:00 estás en Termini.
(atención al punto final intencionado y tan poco visto en un sms jajaja)
El reencuentro fue de esos de película... yo esperando en el andén del tren de la Stazione Termini, el acercándose sin que yo me diera cuenta, cerrándome los ojos y abrazándome con fuerza e incluso regalándome un inesperado beso en la boca (nota aclaratoria: estas demostraaciones de afecto eran especialmente importante dado que limetia tenía una obsesión que rozaba la histeria de que nadie supiera/sospechara de que era gay y las demostraciones de cualquier tipo de complicidad en público estaban totalmente prohibidas).
Nos dedicamos a pasear y recorrer Roma y llegamos por la tarde al hotel...

Algunas horas más tarde, después de cenar por la zona del Trastevere estábamos fumando en la cama cuando nos dimos cuenta de que esto era realmente solo un "asunto pendiente"...
vernos una última vez, vivir aquella noche frustrada en el hotel de Atenas, y confirmar que efectivamente no seriamos nunca una pareja duradera... No fue nada de lo dicho o hecho, solo una reflexión e intuición simultanea, que se tradujo en un momento incomodo que resolvimos apagando los cigarrillos y las luces acordando dormir para descansar (y no hablar que ya teníamos una no tan agradable experiencia de conversaciones en la cama de un hotel).
Me desperté antes que él y me quedé mirándole...
-recientemente encontré una nota que escribí sobre aquella noche ... “Nada más de lo que cabría esperar pero mucho menos de lo que me gustaría encontrar”
El domingo se resumió en nuevas visitas turísticas por Roma y por la tarde volvimos a la Stazione Termini: yo cogiendo el tren hacia el aeropuerto y el hacia Florencia... 
No hablamos aquella tarde... ni mensajes ni nada... El día siguiente por la mañana le envié el siguiente sms
A. “con la melancolía que acompaña los finales... te envío una sonrisa de buenos dias”
F. (se le habían acabado los buenos días y los príncipes, así que solo me escribió) “Cada final es un nuevo comienzo. Te he mandado un mail”
El mail, mucho más corto que de costumbre, solo ponía en palabras lo que no se dijo aquel domingo al despertar.
Respondí -copiando una celebre por aquel entonces frase de mi querida Aspasía que se creía actriz eligiendo papeles- “ese papel ya lo hemos interpretado con gran éxito hace no tanto. Cuidate y pasalo bien”
(...a mi que a veces me pierde el drama...) pasé una corta temporada asumiendo el papel del enamorado no correspondido... que se me pasó entre algún que otro encuentro IRCiano y los preparativos de mi próximo cambio de vida...
...seis meses después cogía el vuelo que me llevaría a mi nueva vida en Madrid ...

moraleja: los limones, aunque sean de una variedad supuestamente dulce, son limones al fin y al cabo y tienden siempre a dejarte con un sabor algo amargo...
... debería de haberlo sospechado cuando me dijo que el tema de su tesis en la universidad fuera ese arbolito y por eso su dirección de mail fuera limetia@...com
como limetia le recuerdo yo... aunque para Aspasia sea “el Florencia”, para oboi_me “el agropecuario”... y a saber que más apodos habrá adquirido desde entonces en otros brazos y círculos de amigos...

con limetia nos reencontramos y nos hemos visto varias veces más en los siguientes años (dado que manteníamos algunos amigos en común), salimos con nuestros respectivos novios por Atenas, nos visitó en una ocasión en Madrid y se quedó a dormir en casa... Es una de esas personas que aparecen en varios momentos de tu vida, te regalan algo bonito que contar y recordar pero que no dejan huella. Es un buen chico, interesante y le tengo mucho cariño pero es uno de tantos con los que no termina uno estableciendo una relación de contacto y amistad regular y permanente.